Proposición: sabemos que la es la mínima de lenguaje que puede tener un sentido. Por lo tanto, decimos que ella posee “autonomía sintáctica”. Ejemplo: “Llueve” o “Juan lee”.
A de las , las proposiciones no tienen autonomía y, por lo tanto, dependen de una oración . No puede decirse, por ejemplo “que toca la batería” (proposición “suelta”, que no forma parte de una oración mayor) porque este enunciado no tiene sentido. Sí puede decirse, en , “Iván es el chico que toca la batería” (acá la proposición forma parte de una oración mayor)
Pueden cumplir diferentes funciones sintácticas dentro de la oración:
sujeto,
objeto directo,
objeto indirecto,
complemento circunstancial,
predicativo subjetivo obligatorio.
Pueden estar encabezadas por un pronombre, un adjetivo o un adverbio relativo denominado nexo relacionante, que desempeña siempre una función sintáctica dentro de la proposición.
Bibliografía:
Educatina
Lengua y literatura Argentina